Happy accidents, bailando con Smile en la playa

Después de su primer disco Painting the sunAll roads lead to the shore (2011) que les dio a conocer, y Out of season (2013) con una evolución folk más personal y atemporal, la banda de Getxo Smile nos trae en Happy Accidents, un sonido contemporáneo y divertido, dejando de lado su lado más intimista por la pista de baile, y las guitarras por los teclados.

Los primeros compases de ‘When the lights change’, te transmiten un clarísimo mensaje optimista que perdura a lo largo de todo el disco, para dejarte llevar bailando descalzo sobre la arena bajo una bola de espejos, corriendo por el parque o ruteando en moto por carreteras secundarias.

El disco abre con Born again, toda una declaración de intenciones que bajo una introducción del teclado va subiendo como un latido creciente la percusión hasta llegar a una explosión de ritmo en la que te descubres moviendo los pies y tamborileando con los dedos sobre la mesa, y te haces una idea de lo que vas a encontrar, teclados y programaciones por encima de las guitarras, y rimo, mucho ritmo y diversión.

Por si alguien podía albergar dudas, llega a continuación When the lights change, tema de su primer single y del magnífico clip que facilitamos a continuación. El ukelele marca el compás mientras te dan ganas de ponerte el bañador, las gafas de sol y salir corriendo para la playa, o ponerte el chaleco de cuero y tirar de moto, carretera adelante.

No todo va a ser movimiento y con Adela, que introducen los bajos, llegan unos minutos de relax, para tumbarte sudoroso en la tabla, echar un cigarrillo a horcajadas sobre la moto en medio de la nada, o dar un achuchón en la pista de baile. Pero sólo unos minutos, porque enseguida vuelve el ritmo y la diversión de la mano de los teclados en  Light you up. Es algo que distingue al estilo Smile, la cuidada distribución de las pistas a lo largo de sus discos. Así, sin darte cuenta, van pasando los temas uno tras otro, Nothing exciting, Such a longtime, Disposable lovers, Keep on, Another day on, más intensos y otros más suaves, en una sucesión armónica y equilibrada que acaba con un atardecer frente al mar y un suave fundido a negro en el magnífico Road of ruin que cierra el disco.

Entre el All roads surfero, el Out of season intimista hasta un Happy Accidents disco, encontramos un hilo conductor común, un estilo propio bien definido y cuidado. Un inequívoco sonido smile, que adquiere matices y pinceladas en cada uno de sus trabajos, que discurren por unos derroteros en los que más que evolución nos encontremos con un auténtico desafío en cada una de sus producciones. Más que sorprender, este último trabajo de Smile no hace más que confirmar las perspectivas que nos aventuraban los anteriores discos. Una banda de debería estar dando mucho de qué hablar.